Política interna
La política interna de un Estado comprende todas las medidas que se toman en vistas al bien común dentro del territorio de un Estado determinado; diferenciándose de las medidas de política internacional que involucran a otros países. Sin embargo no podemos escindir totalmente la política interna de la internacional o externa, ya que tienen influencia recíproca. Por ejemplo, ingresar a un bloque económico o realizar un contrato de intercambio comercial con otros países repercute necesariamente en el ámbito interno.
En el caso de la crisis griega, por ejemplo, se realizó un referéndum el 5 de julio de 2015 donde el pueblo expresó su rechazo a aceptar las condiciones impuestas para el rescate de la deuda desde fuera de su propio Estado. Esto implica que se realizó una consulta sobre qué actitud tomar por parte del gobierno sobre un tema de política exterior; pero que indudablemente tiene repercusión en la política interna del Estado y sobre los ciudadanos griegos en particular, ya que las exigencias suponen un ajuste importante, con gran reducción del gasto público, y por ende, baja de salarios y jubilaciones y aumento de la carga impositiva.
Específicamente considerada, la política interior hace referencia a los partidos políticos, oficialistas y de oposición y su accionar en el ámbito público, especialmente en cuanto a las leyes que se sancionan en el seno del Congreso donde hay representantes de las mayorías y minorías; pero también comprende cualquier medida que se tome en relación directa con la población y el estado general del país, como el otorgamiento de subsidios, reformas constitucionales o legislativas, imposición de tributos, reparación de rutas, establecimiento de precios máximos, privatizaciones, estatizaciones, etcétera.
En general cuando se estudia el accionar de algún dirigente político suelen diferenciarse entre las medidas tomadas durante su gestión, las correspondientes al ámbito interior y las que se relacionan con lo externo.