Política económica neoliberal
La política económica neoliberal surgió a mediados de la Guerra Fría y fue adoptada por aquellos países que sufrieron las consecuencias del tipo de Estado denominado benefactor, que para contrarrestar las injusticias del Estado liberal, intervino mucho en la economía llevando a aumentar excesivamente el gasto público. Este modelo benefactor entró en crisis a partir de 1970.
El nuevo Estado neoliberal intervino poco en la economía, alineándose en este sentido con el liberalismo del siglo XIX, aunque en un contexto distinto determinado en este caso por la globalización, que permitió la actuación de empresas transnacionales y multinacionales. Impuso medidas macroeconómicas que incluyeron el aumento de las tasas de interés; la disminución del gasto público manifestada tanto en reducción de los empleos públicos como de las obras públicas, y en los impuestos sobre la renta y la producción, gravando por el contrario el consumo; privatización de empresas del Estado; flexibilización laboral; fomento a la iniciativa privada, poca regulación estatl en materia económica; y apertura de las importaciones
Estados Unidos bajo los gobiernos de Ronald Reagan y Bush; Margaret Thatcher en el Reino Unido, y las dictaduras militares latinoamericanas fueron ejemplos contundentes de este modelo, seguido por muchos gobiernos democráticos posteriores, tales como el de Carlos Saúl Menem en Argentina, Ricardo Lagos en Chile, Luis Lacalle en Uruguay o Carlos Andrés Pérez en Venezuela, influidos por las recomendaciones del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Este modelo acrecentó la brecha entre ricos y pobres, desprotegió a los trabajadores y promovió la corrupción manifestada por ejemplo en privatizaciones cuyos procesos no fueron claros.